LENTOS PARA CREER

LENTOS PARA CREER

Lee Juan 20:1–10

A primera vista, la fe parece algo fácil de entender. La idea de “solo creer” puede hacer que la fe suene como algo que podemos encender como un interruptor de luz. Para tener fe, uno solo necesita creer. Pero simple no significa fácil. Aquellos que primero escucharon la noticia de que Jesús había resucitado no aceptaron esta noticia fácilmente.

En el capítulo 20 del Evangelio de Juan, leemos lo que parece ser una expansión de un incidente que Mateo describe brevemente en Mateo 28:9. Al llegar a la tumba en la oscuridad, María Magdalena vio que la piedra había sido removida y se dio cuenta de que la tumba estaba vacía (v. 2). Corrió de regreso a los discípulos y les dijo: “¡Se han llevado del sepulcro al Señor y no sabemos dónde lo han puesto!”. Parece que María y las otras dos mujeres se separaron momentáneamente mientras ella se apresuraba a darle esta noticia a los discípulos y luego regresó a la tumba. Cuando comparamos el relato de Juan con el de Mateo, podemos especular que ella se encontró con Jesús antes de volver a entrar en la tumba para escuchar el anuncio del ángel (v. 2).

Juan y Pedro corrieron hacia la tumba. Juan fue el primero en llegar, pero en lugar de entrar, se inclinó y vio las vendas de la tumba. Pedro pasó rápidamente junto a él y vio las vendas, así como el lienzo que había estado envuelto alrededor de la cabeza de Jesús, tirado en un lugar separado. Cuando Juan finalmente entró, vio todo esto y “creyó” (v. 8). Sin embargo, según el versículo 9, no comprendió completamente lo que había sucedido. Juan aceptó el hecho de que la tumba estaba vacía, incluso tal vez que Jesús había resucitado de entre los muertos. Sin embargo, ni él ni Pedro entendieron “la Escritura que dice que Jesús tenía que resucitar” (v. 9).

  • ¿Qué evidencia de testigo ocular ofrece Juan sobre la resurrección de Jesús? Si luchas con la fe, ¿has pedido la ayuda de Dios?

Ora con nosotros

La lectura de hoy nos recuerda que incluso los apóstoles fueron lentos para creer. Dios misericordioso, danos una fe genuina, como la de un niño, llena de dedicación, perseverancia y esperanza.

See omnystudio.com/listener for privacy information.

  • RELIGIÓN ENFERMIZA

    RELIGIÓN ENFERMIZA

  • MÚSICA PRIVADA

    MÚSICA PRIVADA

  • LA MILITARIZACIÓN DEL BARRIO

    LA MILITARIZACIÓN DEL BARRIO

  • MATRIMONIOS DE HOY

    MATRIMONIOS DE HOY

  • LUJO ESENCIAL

    LUJO ESENCIAL

-
-
0:00
0:00